Mitos comunes sobre el seguro de viaje

1: “No necesito seguro, nunca me pasa nada”

Nadie planea enfermarse o tener un accidente en un viaje, pero pasa. El seguro no es por lo que esperás que pase, sino por lo que puede pasar. Y si pasa, ¡mejor estar cubierto!

2: “Es caro contratar un seguro de viaje”

Hay opciones muy accesibles, especialmente si lo comparás con lo que cuesta una consulta médica en el exterior o la pérdida de un vuelo. Un pequeño gasto ahora puede evitar un gasto gigante después.

3: “Con mi obra social o prepaga me alcanza”

La mayoría de las prepagas tienen coberturas limitadas o solo en ciertos países. Además, no suelen incluir cancelaciones, pérdida de equipaje ni asistencia legal. El seguro de viaje es mucho más completo.

4: “Los trámites son un quilombo si tengo que usarlo”

Hoy los seguros tienen apps, atención 24/7 y líneas en tu idioma. La asistencia suele ser rápida, clara y sin burocracia. Algunos incluso gestionan todo por WhatsApp.

5: “No cubre actividades de aventura o deportes”

Sí cubre! Solo hay que elegir el plan adecuado. Existen seguros específicos para deportes y actividades extremas, desde esquí hasta buceo o trekking.